Si bien
este breve repaso por la historia del Chi kung no alcanzará para poder tomar
cuenta de su verdadero alcance sobre el cuerpo, la mente y la salud en general
pues, para ello será necesario practicarlo, no quita que, dicho repaso, pueda
incentivar a algunos lectores a volcarse a su práctica.
En lo que a
mi respecta, lo que me motiva a hacer este recorrido histórico, es un
sentimiento de gratitud hacia todos esos maestros y maestras que a lo largo de
los siglos, dedicaron una buena parte de sus vidas al conocimiento de sí mismos
como de su relación con su entorno. Sin esta dedicación, compromiso y compasión
que ellos mantuvieron a lo largo del tiempo, difícilmente estaría hoy dedicado
a su práctica y enseñanza.
La historia del Chi Kung
El Nei Jing
es la obra célebre de la Medicina Tradicional China. La Biblia de la
acupuntura.
Este libro
data del año 200 a. C. En el se transcribieron las conversaciones que Huan Di,
más conocido como el emperador amarillo, mantenía con su médico personal.
La
perspicacia, astucia y comprensión que este hombre poseía del Tao, lo llevo a
practicar y prescribir una forma de vida a través de la cual se pudiera
alcanzar una longevidad vital y sabia. Para ello, proponía una vida en la que
se pudieran evitar los excesos así como las carencias. Este paradigma surgía
del conocimiento profundo de cómo se mueve la energía en uno, el mundo y el
cosmos, lo que los chinos denominan energías Yin y Yang. Por lo tanto, la
longevidad anhelada, era posible si se lograba poseer una conducta moderada en
todos los aspectos de la vida como en el trabajo, la alimentación, los
ejercicios o cualquier otra actividad
diaria.
Dentro del
chi kung existen cuatro escuelas o filosofías para su práctica.
La escuela
Taoísta, la escuela Confucionista, el Chi kung marcial y la escuela Budista.
Sólo voy a
detenerme en aquellas que conforman mi aprendizaje, práctica y enseñanza.
La escuela Taoísta
Lao Tze,
(552 – 479 a. C) autor del Tao Te King Decía: “Consiguiendo que tu alma
espiritual y corporal abracen la unidad, ¿cómo puedes abandonarla? Concentrando
tu energía y alcanzando la elasticidad ¿puedes convertirte en un recién
nacido?”
Junto al
Nei Jing, el Tao Te King, son las referencias más antiguas de las que se tienen
conocimiento sobre la práctica taoísta de los ejercicios físicos.
Los
ejercicios físicos forman parte del arte preventivo para conservar el cuerpo
saludable. Su desarrollo médico se convirtió en el Chi Kung terapéutico para
tratarse a uno mismo y reforzar el vigor del organismo, constituyéndose en una
disciplina completa de la medicina china, junto a la acupuntura, las moxas, la
farmacopea, la dietética y los masajes y manipulaciones Dao Yin y An ma de la
que forman parte integrante.
Pero de
forma intrínseca, los ejercicios son realizados con el fin de refinar las
energías del cuerpo para acceder a los estados mentales de la visión interior
intuitiva.
Podemos
decir que el Chi kung o Qi gong, es una gimnasia respiratoria a través de la
cual se busca realizar lo que se denomina alquimia taoísta o de transformación
de un estado impuro en uno puro o más elevado.
Esta
alquimia se realiza a partir del conocimiento y comprensión de la existencia de
los tres tesoros del cuerpo humano que son: Jing o, esencia seminal que debe
ser transformada en Qi, energía vital (este proceso se realiza en el calentador
interior o Tan tien situado por debajo del ombligo) y el Shen o espíritu. El
proceso alquímico completo se denomina órbita microcósmica de la que escribí en
entradas anteriores.
Estas etapas
de transmutación alquímica se apoyan sobre el control de la respiración añadido
a la toma de conciencia y a la sensación física del Qi o Chi, de la energía que
circula en los meridianos y en el interior del cuerpo.
Estas
técnicas en el taoísmo han permanecido vivas a lo largo del tiempo sufriendo
diversas modificaciones con lo cual, se puede decir que el Chi Kung por su
condición empírica, a estado siempre actualizándose en el alma y el cuerpo de
cada persona que lo practico en el pasado como en todos los que hoy en día
continúan haciéndolo. De ahí la importancia de observar que, aunque se
delinearon específicamente multiplicidad de ejercicios para actuar sobre los
distintos estados de salud del practicante y sus circunstancias, también fueron
descubriéndose otros atributos que esos mismos y legendarios ejercicios
poseían. (algunos de estos ejercicios físicos también aparecen mencionados en
otras entradas de este mismo Blog, como por ejemplo, “Los seis sonidos
curativos”, “El abrazo del árbol” o, “el juego de los cinco animales”
Chi kung Budista
La llegada
a China del Monje Indio Bodhidharma o, Da Mo en chino, durante el primer siglo
de nuestra era, y su enseñanza de las prácticas Budistas, influyo tanto en la
práctica del Chi kung como en las artes marciales, la pintura, la poesía, la
religión, la filosofía y en muchos otros aspectos de la vida cotidiana de ese
país.
Básicamente,
la práctica del Chi Kung budista se basa en zazen o meditación sentada. La
historia cuenta que cuando Bodhidharma llego a China, y tras su encuentro con
el emperador de la época quién al parecer tenía sobre el Chan o el Zen una idea
equivocada o tergiversada de su práctica y de ahí su inmediato desinterés sobre
Bodhidharma, Da Mo se instalo en el mítico templo Shaolín. Allí pudo observar
que, aunque los monjes practicaban la meditación sentada, estos mostraban
claros signos de debilidad física. Ante esto, Da Mo ideo una serie de
ejercicios que en Chi kung se los conoce como: YI Jin Jing o,“Tratado para
ejercitar los músculos”.
La práctica
de estos doce ejercicios de estiramiento y respiración permitió a los monjes no
sólo fortalecer sus cuerpo sino, hacer más intensiva su dedicación a la
práctica meditativa.
Varios
siglos después, se cuenta que un militar del ejercito chino, Yue Fei (1103 –
1142) que vivió bajo la dinastía de los Song, basándose en estos ejercicios
creo lo que hasta hoy se conoce como las 8 piezas de brocado o, Ba Duan Jin.
Esta secuencia a devenido en un clásico de la práctica de Chi Kung en
todas las escuelas de la especialidad cuya finalidad era y es, el
fortalecimiento corporal, mental y espiritual.
En la China
actual, es muy común ver a miles y miles de hombres y mujeres realizar estos y
muchos otros ejercicios de Chi kung en plazas y parques de ese país con la
misma naturalidad con que los occidentales salimos a las calles a caminar o a
andar en bicicleta.
La historia
del Chi Kung o Qi gong, más extensa de lo que aquí expongo, está cargada de
nombres, lugares y métodos distintos pero, conservando un mismo espíritu o
aliento, el de vivir con plenitud, dignidad y sabiduría por todo el tiempo que
llevemos haciéndolo en un cuerpo humano.
Nota. Imagen 1: Antiguo rollo de seda descubierto en una tumba de la Dinastía Han cuya antiguedad está fechada 200 años antes de nuestra era en el que se observan unas figuras humanas realizando ejercicios de Chi Kung.
Fuente consultada: Ives Requena - Chi Kung
Publicado por Claudio