viernes, 5 de julio de 2013
Para que los hombres
Para que los hombres no tengan verguenza
de la belleza de las flores,
para que las cosas sean ellas mismas: formas sensibles
o profundas de la unidad o espejos de nuestro esfuerzo
por penetrar el mundo,
con el semblante emocionado y pasajero de nuestros sueños,
o la armonía de nuestra paz en la soledad de nuestro pensamiento,
para que podamos mirar y tocar sin pudor las flores, si,
las flores y seamos iguales a nosotros mismos en la hermandad delicada,
para que las cosas no sean mercancías,
y se abra como una flor toda la nobleza del hombre:
iremos todos hasta nuestro extremo límite,
nos perderemos en la hora del don con la sonrisa
anónima y segura de una simiente en la noche de la tierra.
Juan Laurentino Ortiz - Poeta
Juan "L" Como se le decía, nació el 11 de junio de 1896 en la provincia de Entre Rios - Argentina, y falleció el 2 de septiembre de 1978.
Paso su infancia en las selvas de Montiel, (Entre Ríos) un paisaje que marco su poesía para siempre. Realizo estudios de filosofía y vivió un corto tiempo en Buenos Aires.
Entre su poética se destaca "El Gualeguay" y su temática, delicada y contemplativa, rondaba siempre por los paisajes de su tierra como la selva, el río, los árboles como por su compromiso social especialmente por la pobreza y los niños que la sufrían.
Publicado por Claudio
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Para que las flores no tengan verguenza del corazón del hombre.Ellas se abren y se muestran para que él comprenda.
ResponderEliminarTe agradezco esta poesía.
Cuando uno lee poesía el viaje que genera para el alma es eterno y el pasaje solo se consigue con amor.
Un fuerte abrazo
Si, Adri así siento y me pasa cuando leo poesía y más, si es de este entrañable poeta que conocí hace muchos años a través de su prosa.
EliminarAbrazos