Cuando pronunciamos la palabra agua pensamos: viene del río; pero el agua no es sólo el río, también es la montaña, el manantial, la orilla. El agua son las rocas, los bosques que la circundan, los animales y los insectos.
El agua es el mar y el pez; es la espuma, la ola y la arena.
El agua es el horizonte, el cielo, el sol que la evapora y la nube de la que cae la lluvia.
El agua sos vos y soy yo que somos agua.
El agua somos todos que somos uno en perfecta interdependencia.
Así es que, fiados de la palabra, hemos perdido la capacidad de sentir directamente el agua en todos sus aspectos hasta el extremo de no respetarla, no cuidarla, envenenándola para nosotros y todo cuanto tiene vida. Esta es la ignorancia, destructividad y sufrimiento de la mente que discrimina y se queda con lo que quiere en el momento, sin caer en la cuenta de que no hay actos aislados sino rosarios, cascadas.
Todo está interrelacionado. Todo es interdependiente. Todo es Uno
Texto basado en los comentarios del Maestro Zen Soko Daido, sobre la interdependencia.
Publicado por Claudio
Texto basado en los comentarios del Maestro Zen Soko Daido, sobre la interdependencia.
Publicado por Claudio
me animo a decir que cuando aprendamos que es mucho lo que dependemos unos de los otros la felicidad dejará de ser una meta para pasar a ser nuestra realidad. Paula
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