viernes, 5 de octubre de 2012

Meditación y salud



Durante los primeros días de septiembre último y a raíz de la visita a la Argentina de Sri Sri Ravi Shankar, algunos medios se hicieron eco de un interés cada vez mayor de la ciencia médica por la práctica de la meditación con fines terapéuticos.
El diario Tiempo Argentino bajo el título: "Para la ciencia, meditar hace bien al corazón y sube las defensas", publicó un artículo dando cuenta de ello.
Aquí comparto con ustedes un extracto de dicho artículo.
 
 
"Los niveles de relajación alcanzados durante la práctica diaria de la meditación disminuyen la presión arterial, el colesterol 'malo' (LDL) y la presión intraocular, junto con esto aumenta la creatividad verbal y las funciones intelectuales", afirma Jorge Berra, pediatra y médico de familia en la Fundación Ayurveda. Para el profesional, quien también dicta cursos en la Facultad de Medicina de la UBA, la práctica regular de la meditación puede disminuir en 10 milímetros la presión arterial diastólica (mínima) que es fundamental en el diagnóstico de hipertensión. "La meditación también ayuda a los pacientes en tratamiento de quimio y radioterapia, mejora su calidad de vida y disminuye el dolor", destaca Berra.

Un estudio de la Universidad de Wisconsin-Madison en colaboración con el actual Dalai Lama y otros monjes budistas demostró que gracias a la meditación se crean nuevas conexiones neuronales que son las culpables de que se puedan alcanzar niveles de consciencia nunca antes experimentados. Los últimos resultados de este estudio, liderado por los neurocientíficos Antoine Lutz y Richard Davidson, y publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, informaron que los monjes budistas que llevan largo tiempo practicando meditación presentan una gran actividad en una zona determinada del cerebro, justo detrás de la parte izquierda de la frente, en la corteza prefrontal izquierda. Esa área se asocia a las emociones positivas y al estado de calma, y a través de la relajación alcanzada se generan neurotransmisores que amplifican la concentración.
 
 
 

Para Roberto Rey, neurólogo y director del Instituto Argentino de Investigación Neurológica, "los meditadores llegan a una sensación de común unión con el universo. No lo puedo asegurar, pero diversos estudios lo han indicado, se debería a la activación de transmisores endógenos en el cerebro."

En la Argentina, el Instituto de Neurología Cognitiva (INECO) también está realizando investigaciones sobre los efectos que la meditación produce en el cuerpo humano. Martín Reynoso es coordinador del área de Mindfulness (un tipo de meditación) de INECO y miembro del estudio con el cual se pretende analizar en qué medida se modifican la memoria o la atención a partir de la meditación. "Aún no contamos con resultados, pero de la autorregulación de la atención plena pueden emerger cerebros más justos, solidarios y empáticos que favorezcan una vida más armónica."

 

 

 

Alberto Lóizaga es médico clínico, psicoanalista e instructor en técnicas de meditación. En 1970 se recibió en la UBA, y fue por aquella época que escuchó hablar de meditación cuando el gurú Maharishi Mahesh Yogi (instructor de Ravi Shankar) visitó la Argentina. En 1975 fue jefe de residentes del Hospital de Clínicas, y comenzó a utilizar técnicas meditativas en pacientes que necesitaban diálisis o en aquellos que padecían hipertensión. "Se accede a un cuarto estado de conciencia en el que se producen cambios biológicos. He constatado que mediante la meditación puede curarse el asma, el broncoespasmo, la colitis, y el estrés", aseguró el doctor.

Durante la meditación la persona entra en un estado placentero, "de enorme felicidad", describió Lóizaga. Para la ciencia, la explicación biológica es que al meditar, en el cerebro predominan los factores de relajación que inhiben la liberación de adrenalina y cortisol, lo cual ocasiona una baja de la frecuencia cardíaca y estrés en general. Alejandra Ciappa es médica y se especializa en neurobiología psiquiátrica en Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro. Para ella, "el ser humano necesita relajarse, y los resultados de la meditación son notorios, el cerebro tiene capacidad de crear nuevas conexiones neuronales".

 
 
 Richard Davidson
 

Otros procesos que se ponen en juego en el cuerpo son: la reducción de las cantidades de uropepsina y la concentración de ácido láctico (lo que causa la fatiga), el riego sanguíneo aumenta hasta un 35% y todas las actividades cerebrales funcionan mejor. Además, la meditación afecta a los lóbulos temporal y parietal del cerebro, asociados a la orientación física. De esta forma, se produce una pérdida de la sensación de individualidad y del espacio-tiempo.

 

La conexión entre ciencia y espíritu logró el nacimiento de la medicina integrativa que atiende la relación de los sistemas de control humano, el psicológico, el endocrinológico, el neurológico y el inmunológico. Rosana Mollo es miembro de la Fundación Ayurveda (sistema de medicina de originario de la India) y magister en Psiconeuroinmunoendocrinología, rama de la medicina que se ocupa de estudiar las relaciones entre los cuatro sistemas de control que tiene el organismo humano. "Aconsejo a mis pacientes que mediten. Afortunadamente, la práctica se está instalado en muchos servicios de hospitales y sanatorios para prevenir los eventos agudos de cardiología recuperación de infartos", dice la profesional, quien prefiere no mencionar el nombre de esas instituciones por la existencia de "una doble moral" que, de hacerse pública, podría cancelar las prácticas.

 
 
 

BÚSQUEDA ESPIRITUAL. "Más del 70% de las personas que se acercan a practicar yoga o meditación fueron derivadas por sus médicos", asegura David Lifar, presidente de la Fundación Indra Devi dedicada al "yoga, arte y ciencia de vida". "Los médicos los derivan para que el proceso de sanación sea más corto", explica Lifar y asegura que el yoga brinda elementos para reestablecer una nueva armonía, así como también aliviar dolores de cabeza, mejorar calidad de sueño. "Las diferentes posturas del yoga ayudan al sistema nervioso, permitiendo que se libere el estrés y las toxinas acumuladas en él."

Por su parte, Edgardo Caramella, presidente del Método de Rose, federación en la que se practica la meditación, también asegura que "se notó un incremento de la demanda. La gente se encuentra en una búsqueda interior", y agrega que "meditar es parar de pensar, aprender a concentrarse, ya que nuestra mente está en continua dispersión, pero nunca nadie nos enseñó a concentrarnos, el poder de la mente es infinito". «

 

Por Yesica de Santo
Diario Tiempo Argentino 02-09-12
 
Publicado por Claudio

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario